vivienda usada

Una de las decisiones que deben tomar quienes buscan por primera vez adquirir su vivienda propia, es si invierten en una vivienda nueva o una usada. En esta entrada, comparamos las ventajas y desventajas que ofrece cada una de estas opciones.

Vivienda usada

Ventajas

Las viviendas usadas tienen a su favor el metraje. Normalmente por haber sido construida hace algún tiempo, cuando el costo de la tierra no era tan alto y los constructores tenían la posibilidad de ofrecer más metros de construcción, las casas y apartamentos se construían con áreas más generosas.

Adicionalmente, las familias de hace algunos años solían ser numerosas y requerían de mayor espacio para atender sus necesidades habitacionales. Es así como en este segmento, se pueden encontrar inmuebles que ofrecen mayor área construida a precios competitivos.

Otra ventaja es la posibilidad de remodelar y personalizar la vivienda, ya que el menor valor pagado por el inmueble usado, permite en algunas ocasiones asumir costos adicionales para adecuar la vivienda según gustos personales.

Sin embargo, esto también puede considerarse una desventaja en algunos casos, ya que al costo de la vivienda hay que agregarle el costo de la remodelación, y al final puede resultar igual de costoso que una vivienda nueva.

Desventajas

Entre las desventajas de la vivienda usada, encontramos que el inmueble no contará con las garantías que ofrecen las constructoras, y puede presentar algunos inconvenientes en los sistemas hidrosanitarios y eléctricos por la vejez de las instalaciones, así como también problemas con los acabados del inmueble que por su uso y falta de mantenimiento hayan cumplido su vida útil.

Para evitar estos inconvenientes, es recomendable que antes de comprar una vivienda usada, el comprador haga una inspección física en la que se compruebe el buen estado del inmueble.

Otra desventaja es que al ser una vivienda que ya está construida, el pago del inmueble debe hacerse todo en el mismo momento, ya sea con recursos propios o con financiación, debido a que este tipo de propietarios esperan el pago inmediato.

Si se cuenta con los recursos disponibles, es una situación ideal, pero sino, el comprador deberá acudir a una entidad financiera y solicitar un crédito hipotecario que deberá pagar en un plazo acordado.

Vivienda nueva

Ventajas

La principal ventaja de una vivienda nueva, es la garantía que ofrece el constructor y la seguridad de que no han tenido uso previo. Legalmente los constructores estamos obligados a responder por los acabados de los inmuebles durante 1 año y por su estabilidad estructural durante 10 años. Además, estas construcciones usualmente hacen uso de acabados modernos y atractivos.

Otra ventaja es la forma de pago. Las constructoras ofrecen plazos para ir pagando la cuota inicial mensualmente, un monto que normalmente asciende al 30% del valor de inmueble.

Lo anterior es una ventaja porque se van haciendo abonos periódicos y permite que la financiación, en caso de requerirla, sea solo del 70%. Es decir, que en vez de solicitar un crédito por el 100% del valor del inmueble, solo se solicita por el 70%. Esto disminuye el monto a pagar por concepto de intereses.

Pero probablemente, la ventaja más importante que tiene la vivienda nueva en Colombia, en estos momentos, es que se puede acceder a los subsidios que otorga el Gobierno. Esto es un beneficio muy importante porque permite a las familias, comprar su vivienda a un menor costo para ellos.

Desventajas

La desventaja más evidente de las viviendas nuevas, es el área de construcción. Debido al aumento en el valor de la tierra, las constructoras deben maximizar este recurso para lograr proyectos que sean económicamente viables.

Es así como cada año se ofrecen inmuebles con áreas más reducidas, sumado a la tendencia de reducción en el tamaño de las familias. De hecho, las nuevas tendencias de construcción se enfocan en conceptos como “micro-living”  o “co-living” . En estas tendencias los espacios para habitar se reducen a su mínima expresión.

La característica expuesta anteriormente, suele venir acompañada de precios mayores por m2 de construcción. Esto se explica también por el costo de la tierra y por la valorización que tienen las viviendas en un mercado que es cada vez más exigente en cuanto a calidad de instalaciones y acabados.

Otra desventaja es que, en proyectos de vivienda nueva, los acabados que se entregan suelen ser estandarizados. Para lograr alguna personalización, si la constructora lo permite, deben negociarse las condiciones.

Es claro entonces, que la decisión depende de las necesidades y deseos de cada cliente. Su capacidad de pago y endeudamiento, también influenciarán en este proceso, pero los puntos anteriores ayudan a hacer un análisis más completo.

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